Lobos Marinos y el eterno embarazo de las hembras
El macho de lobo marino puede copular muchas veces por día a lo largo de toda la temporada reproductiva, con las distintas hembras de su harén que oscilan entre 2 y 12 hembras. En las hembras la situación es diferente porque puede copular solo con el macho de su harém. El período de gestación es prolongado y solo puede tener un hijo por año. Es por eso que en el proceso evolutivo desarrollaron una vida de entre 15 y 18 años, para poder tener cada hembra la mayor cantidad de crías posibles a lo largo de su vida.
Es así que el ciclo reproductivo de las hembras comienza cuando alcanza su madurez sexial, entre los 3 y 5 años. Cuando llegan en diciembre a la colonia de reproducción copulan con el macho de su harém y un año después paren su primera cría y aunque parezca increible a los 6 días entran nuevamente en celo, paso previo a quedar nuevmente preñadas. Ellas vuenven a su colonia habitual y mientras gesta al nuevo lobito marino, tendrá que amamantar a su bebé hasta noviembre y dos meses después parirá a la nueva cría. Este ciclo de gestación y parto se repite año tras año, durante toda su vida. Pudiendose afirmar que practicamente viven en un continuo ciclo de gestación.